Advertencias sobre la anexión de Cisjordania durante la tregua en Gaza
Los altos funcionarios de la Administración de Donald Trump, que actualmente están realizando visitas en Israel para asegurar la tregua en Gaza, han advertido que una posible anexión israelí del territorio palestino de Cisjordania puede amenazar el alto el fuego. Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, calificó esta anexión como una “amenaza” para el acuerdo. El vicepresidente J. D. Vance, tras finalizar una visita de tres días, expresó su descontento por la coincidencia de la votación y subrayó que “la política de Trump es que Cisjordania no será anexionada”.
La votación sobre la anexión fue impulsada por la oposición, desafiando al Gobierno de Benjamín Netanyahu, y se convirtió en un tema polémico en un momento en que se esperaba mejorar la situación en Gaza. A pesar de que se trataba de una votación preliminar, y requería más trámites legislativos, el Gobierno podría haberla promovido unilateralmente. Actualmente, Cisjordania está bajo ocupación militar israelí desde la Guerra de los Seis Días en 1967.
Trump había manifestado su oposición a la anexión en un encuentro previo con líderes árabes. En una entrevista reciente, reafirmó su postura: “No sucederá. He dado mi palabra a los países árabes y, si Israel avanza con esto, perderá todo el apoyo de EE. UU.”.
Reacciones a la propuesta de anexión
Durante su visita, Vance reiteró que la Administración de Trump se opone firmemente a la anexión de Cisjordania, un territorio que es considerado por el derecho internacional como parte de un futuro Estado palestino. Vance también se mostró “ofendido” por la “maniobra política estúpida” que ocurrió en la Knesset durante su estancia en Israel, alineándose con la postura de su partido, el Likud, que intentó evitar la votación mientras él estaba en el país.
El primer ministro israelí, Netanyahu, emitió un comunicado descalificando la votación como una “provocación política deliberada” por parte de la oposición, y recordó que solo un miembro de su partido la respaldó. Es poco probable que el proyecto avance sin el apoyo del Likud.
Eventos similares en el pasado
Este episodio recuerda a un incidente en 2010, cuando Joe Biden, entonces vicepresidente de Barack Obama, enfrentó una situación similar. Antes de su llegada a Israel, se aprobó la construcción de 1.600 viviendas en una colonia de Jerusalén Este, lo que Biden consideró como una falta de respeto y una amenaza a las negociaciones de paz.
Vance y Rubio continuaron sus encuentros Diplomáticos, subrayando que la anexión israelí de Cisjordania podía poner en riesgo el acuerdo de paz. Ambos se mostraron optimistas sobre el avance del alto el fuego en Gaza, pero también reconocieron los “retos” y “obstáculos” que aún deben superarse.
Trump ha abordado la cuestión de la anexión de Cisjordania en varias ocasiones, reafirmando que no permitirá que Israel la lleve a cabo. En el contexto actual, queda claro que la situación sobre el terreno sigue reflejando la complejidad del conflicto, con un número creciente de colonos en Cisjordania, que ya supera los 700,000, mientras los palestinos enfrentan restricciones severas.
