Recuerdos y Espacios Significativos en Santiago
Parque Juan XXIII. Este emblemático parque está experimentando una revitalización a través de la recuperación de su anfiteatro griego, que alguna vez fue el escenario de numerosos musicales. En mi infancia, pasaba horas disfrutando de las improvisaciones y las apasionantes batallas de gallos, un reflejo de mi amor por el hip hop y el rap. Recuerdo con mucho cariño los paseos por el parque con mi abuelo Guillermo, conocido como el Tata Willy. Él fue una figura parental fundamental en mi vida, enseñándome la importancia de elegir a las personas adecuadas alrededor y de organizar a la comunidad. Su legado de organización se impactó a través de sus esfuerzos en Quillota, donde formó un comité de pavimentación.
Estadio Nacional
El Estadio Nacional es otro lugar que evoca fuertes recuerdos personales. Mi abuelo, tras la victoria de Patricio Aylwin, enfatizó la unidad del país al decir: “Civiles y militares, Chile es uno solo”, un mensaje crucial en un periodo de polarización. Este estadio no solo es un sitio que recuerda la historia de la violación de derechos humanos, sino también un lugar donde se celebran las victorias de la selección chilena de fútbol, reflejando la complejidad de nuestra identidad nacional. A lo largo de los años, he sido un ferviente seguidor de la Universidad de Chile y, en mis años de juventud, encontraba formas ingeniosas de ingresar al estadio, como esperar a que abrieran las puertas en el minuto 15 del segundo tiempo.
El Peyo
El Peyo, un lugar que destaca por su tradición culinaria chilena, me trae recuerdos de celebraciones, incluyendo un programa de radio que tuve en mis inicios. Durante mi campaña presidencial, solía relajarnos con mi equipo disfrutando de sus deliciosas especialidades.
Feria de Emilia Téllez
En la Feria de Emilia Téllez, un mercado famoso por su oferta de verduras y su selecta pescadería, he encontrado productos únicos, como hinojo. Este lugar, con su particular arquitectura, ha sido mi principal fuente de ingredientes para cocinar. La cocina se ha convertido en un espacio de conexión con mis hijos, permitiéndoles disfrutar de mis preparaciones, como el osobuco al pomodoro y las deliciosas ostras con habas salteadas.
La Fuente Suiza
La Fuente Suiza, un local icónico que ha preservado su calidad a lo largo de los años, es otro de mis lugares preferidos. Su famoso lomito completo es un testimonio de la rica cultura gastronómica de Santiago.
Palacio Ossa
Palacio Ossa, una antigua propiedad de la familia Alessandri, se encuentra en proceso de restauración, convirtiéndose gradualmente en un centro cultural. Este palacio alberga la biblioteca municipal Gabriela Mistral, un espacio dedicado al conocimiento y la cultura.
Plaza Egaña
La Plaza Egaña es un sitio que guarda muchas memorias. La visita al banco del desarrollo, justo después de la muerte de mi abuelo, marcó un hito en mi vida. Aquella experiencia, de retirar el dinero que me había depositado a lo largo de los años, simbolizó un nuevo comienzo, ya que me permitió adquirir mis primeros muebles.
La Batuta
La Batuta ha sido durante años un espacio donde he disfrutado de la música y el baile. Este lugar, conocido por su ambiente festivo, me ha permitido conectar con diferentes momentos de mi vida, como mis citas con Bárbara, ahora mi esposa. He presenciado el ascenso de varias bandas chilenas en este escenario.
Plaza Ñuñoa
La Plaza Ñuñoa se ha convertido en el epicentro cultural de mi vida. En este lugar, donde confluyen actividades de diferentes índoles, desde ceremonias religiosas hasta eventos culturales, he encontrado paz y confort. La casa de mi abuelo siempre fue un refugio en el que me sentía seguro y sereno.
Barrio Italia
Finalmente, el Barrio Italia es un reflejo de mi pasión por el anticuario. Mi madre me inculcó el gusto por recorrer ferias en busca de objetos únicos. En mi hogar, atesoro una colección de recuerdos, desde juguetes antiguos hasta un sillón que ha sido el centro de reuniones. Este espacio conforma una parte importante de mi identidad y de mi historia familiar.
