La periodista Diana Calderón advierte sobre el cambio en la política geopolítica de Colombia, que ha comenzado a inclinarse hacia el apoyo al régimen venezolano. Este cambio se manifiesta en un incremento de las relaciones del país con potencias como Irán, China y Rusia. Calderón resalta que este enfoque puede entrar en conflicto con la política exterior estadounidense, que busca limitar la influencia de esas naciones en América Latina.

Calderón enfatiza que «Colombia necesita una estrategia de política exterior que permita cooperar sin someterse», sugiriendo que el país debe evitar el dilema de elegir entre el conflicto directo con Estados Unidos o la sumisión a las potencias emergentes. Esta estrategia es crucial para mantener la soberanía y la autonomía en un contexto internacional cada vez más complicado.