Confesiones en la Jurisdicción Especial para la Paz
Las confesiones recientes ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) han destapado hechos que, hace más de una década, fueron relatados por exparamilitares y cubiertos por diversos medios de comunicación. Estos testimonios incluyen casos que avanzaron en la justicia, otros que fueron enviados a la Fiscalía y muchos que aún permanecen en la impunidad.
El legado de la parapolítica en la Costa Caribe
Las revelaciones del político liberal Ashton han arrojado luz sobre una verdad que ha sido sistemáticamente negada por las élites políticas de la Costa Caribe colombiana. Más de 20 años después, la justicia sigue sin llegar a esta región, donde clanes políticos continúan ejerciendo poder e influencia en elecciones locales y regionales, alimentando un entramado político y financiero que se remonta a los negocios con grupos ilegales y al legado del fenómeno paramilitar.
La trayectoria de Ashton en la JEP
Ashton fue admitido en la JEP en 2018 con la expectativa de que proporcionara información detallada sobre sus conexiones con clanes políticos y el Frente José Pablo Díaz del Bloque Norte de las AUC. Sin embargo, en octubre de 2021, los magistrados consideraron sus aportaciones como “insuficientes” y acabó perdiendo el beneficio de la libertad transitoria. Con el tiempo, Ashton cambió su postura, traicionando a sus antiguos aliados y señalando a otros políticos como responsables de delitos.
Políticos implicados
Entre los políticos mencionados por Ashton se encuentran figuras relevantes como el actual presidente del Senado, Efraín José Cepeda, y los senadores Mario Enrique Varón Olarte, Jaime Cervantes Várelo, Jorge Gerlein y David Char Navas. Este último, en 2022, admitió ante la JEP sus vínculos con el paramilitarismo y expuso un esquema de compraventa electoral en la costa colombiana.
Vínculos con el poder legislativo
Ashton también aludió al ministro del Interior, Armando Benedetti, como un puente entre el paramilitarismo y el poder legislativo, ya que supuestamente facilitó la aprobación de artículos que favorecieron a los grupos paramilitares. Asimismo, mencionó a otros políticos locales y empresarios, como David Name Terán y Roberto Castillejo, vinculándolos con la injerencia paramilitar en la administración pública.
Impacto del paramilitarismo en el Congreso
Las confesiones de Ashton alimentan investigaciones sobre la influencia del paramilitarismo en el Congreso. En 2012, el exparamilitar Mario Marenco declaró que el plan de captura de contratos continuó luego de la desmovilización, apuntando a un entramado que permitió a varios políticos y empresarios mantener su control sobre la administración pública. La JEP ha comenzado a desentrañar esta compleja red de corrupción y alianzas ilegales.
El control paramilitar en la Costa Caribe
El Bloque Norte de las AUC ha sido responsable de numerosas masacres y de la penetración en el Estado a través de la política. Se estima que su influencia se manifestó en la creación de corporaciones públicas y en el control de recursos destinados a obras y servicios, mostrando la relevancia de testimonios como el de Ashton para entender esta dinámica.
Responsabilidad de las elites políticas
Las revelaciones sobre el paramilitarismo y la corrupción en Colombia reflejan un proceso judicial que sigue arrojando luz sobre vínculos oscuros. Desde 2016, existen más de 16.000 expedientes pendientes de investigación relacionada con financiamiento y colaboración con grupos paramilitares. La JEP busca esclarecer quiénes han continuado beneficiándose de las economías ilícitas tras la desmovilización de los paramilitares.
La memoria histórica y el papel de la JEP
El Centro Nacional de Memoria Histórica ha documentado más de 456 masacres atribuidas al Bloque Norte, resultando en miles de víctimas. La JEP tiene la responsabilidad de avanzar en la construcción de un marco jurídico que permita cerrar las heridas dejadas por décadas de violencia y corrupción, asegurando que estos crímenes no queden impunes.