Tragedia en Catarroja: La última llamada de Antonio durante la tormenta
Antonio, un anciano discapacitado en un 66%, falleció en su hogar en Catarroja el 29 de octubre de 2024, en un episodio devastador de diluvio que dejó 229 muertos en Valencia. Su historia es una de las 37 muertes que se investigan tras la tragedia. La magistrada Nuria Ruiz Tobarra ha abierto un caso para esclarecer las circunstancias de estas muertes, muchas de las cuales estaban conectadas a un servicio de teleasistencia proporcionado por la Generalitat y la Diputación de Valencia.
La angustiosa última llamada
Las últimas horas de Antonio fueron registradas durante una serie de llamadas entre él y el servicio de teleasistencia. A las 19:30 horas, Antonio contactó a la operadora Patricia, comunicando una situación crítica en su hogar inundado.
Operadora: «Hola, buenas. Soy Patricia del servicio de teleasistencia avanzada de la Generalitat. Le informo que la conversación puede ser grabada, ¿en qué puedo ayudarle?»
Antonio: «Tengo medio metro de agua en casa.»
Operadora: «Intente ponerse en un sitio alto. Voy a llamar a sus hijos, ¿de acuerdo?»
La conversación continuó con Antonio manifestando su preocupación por la llegada de sus familiares, quienes enfrentaban dificultades debido a las inundaciones en su calle. Patricia le aconsejó que se mantuviera en un lugar seguro mientras intentaba comunicarse con sus hijos.
Los esfuerzos por localizar a Antonio
Media hora después, se notificó a Antonio que su hija estaba intentando llegar a su casa. Sin embargo, la situación se tornó desesperante. Mientras tanto, la hija de Antonio se comunicaba con la operadora, expresando sus ansias por ayudar a su padre.
Hija: «Estoy llamando a mi tía, y dice que el agua llega por la cintura. No sé si vamos a poder llegar.»
La operadora tomó nota de la situación, advirtiendo a sus colegas sobre la condición crítica de Antonio, quien se encontraba solo y con movilidad reducida.
La desesperación se apodera de la familia
La comunicación más tarde entre la hija y otro operador muestra el creciente sentido de urgencia. A las 20:00 horas, se había perdido el contacto con Antonio, quien había estado reportando su situación crítica.
Operadora: «Hemos dejado el aviso en el 112, pero no hemos podido contactar con su padre desde hace un tiempo.»
La hija, angustiada, intentó sin éxito contactar al 112, que se encontraba completamente saturado. Mientras tanto, la situación en Catarroja se complicaba, con calles inundadas y cortes de servicios de telefonía, lo que dificultaba aún más la comunicación y el acceso a ayuda.
El impacto de la tormenta en la región
Antonio fue una de las 25 víctimas fatales de lo que se considera la peor tromba de agua del siglo en Catarroja. Este evento ha desatado una serie de cuestionamientos sobre la eficacia y la preparación de los servicios de emergencia ante desastres naturales, así como la responsabilidad de las autoridades para asegurar la protección de personas vulnerables.
