La Cumbia en Monterrey: Un Legado Musical en La Independencia
La cumbia es más que un estilo musical; representa una forma de vida para Mario Alberto Alfaro, un apasionado músico de 52 años y miembro de la dinastía Zorro Agustín, una agrupación emblemática de cumbia en La Independencia, un barrio de Monterrey. Desde los años setenta, esta agrupación ha contribuido a tejer una rica cultura alrededor de la música caribeña colombiana. Alfaro explica que la cumbia “no solo es la banda sonora en medio de las penurias, sino una forma de vida que integra ritmos africanos, indígenas y españoles.”
La Dinastía Zorro Agustín
La dinastía Zorro Agustín, nombrada así en honor al hermano de Alfaro, es representativa de las viejas agrupaciones de sonideros. Alfaro recuerda cómo comenzó su carrera a los 15 años, aprendiendo a manejar el equipo de sonido y a poner música. “Mi hermano fue mi maestro, y él dejó un legado que me inspira a seguir adelante,” comenta.
El Barrio La Independencia
La Independencia, que ha sido considerada violenta y peligrosa, posee una comunidad vibrante y trabajadora. Fundada a mediados del siglo XIX por migrantes de San Luis Potosí y Zacatecas, este barrio se caracteriza por sus coloridas casas y callejones serpenteantes. Yasodari Sánchez, una académica que investiga la cultura sonidera en Monterrey, aclara que, a pesar de los tabúes, La Indepe es un lugar donde la vida se celebra con pasión.
Memoria Colectiva y Cultura Musical
La música y el baile han forjado una identidad cultural única en La Independencia. “Los fines de semana, en cada rincón se escucha la cumbia, una expresión de orgullo para quienes la disfrutan,” dice Alfaro sobre la rica vida sonidera del barrio. Parte de esta cultura consiste en el coleccionismo y el intercambio de discos, formula que permite a los sonideros mantener su repertorio actualizado.
Coleccionismo y Viajes a Colombia
Los músicos, como Alfaro, viajan frecuentemente a Ciudad de México y, si pueden, a Colombia, país considerado la cuna de la cumbia, para adquirir discos. “Allí se encuentra la verdadera esencia de esta música hermosa que amamos,” afirma. Alfaro ha logrado reunir una colección impresionante de 2,500 discos, todos de origen colombiano.
Influencia de la Cumbia Rebajada
Una parte significativa de la escena cumbiera en Monterrey es la cumbia rebajada, un subgénero que presenta tempos más lentos. Esta innovación surgió accidentalmente por un fallo en el equipo de sonido. José Rada García, un coleccionista veterano, explica que este estilo se ha vuelto popular entre los cholombianos, una subcultura juvenil marcada por su estilo distintivo y su respuesta a la violencia social. Esta historia fue retratada en la película Ya no estoy aquí, que destacó la cultura cumbiera de Monterrey a nivel internacional.
Celebración de la Cultura Cumbiera
A pesar de que Rada no es fanático de la película, reconoce que ha despertado el interés en la cultura cumbiera de Monterrey. “La Independencia es conocida como la ‘Colombia chiquita’ de México,” comenta Jaime Andrés Monsalve, de Radio Nacional de Colombia. “Hay una reinvención del país gracias a los regios que han sabido adoptar y celebrar nuestra música.”
El Legado de Celso Piña
La figura de Celso Piña también es central en La Independencia. Considerado el representante máximo de la cumbia en Monterrey, su familia preserva la casa donde vivió, organizando festivales y clases para mantener vivo su legado. “Quiero asegurar que la memoria de Celso perdure,” dice su hermana, quien se ha comprometido a continuar su trabajo a través de la educación musical.
En resumen, La Independencia no solo es un refugio para la cumbia, sino un foco de unión cultural que entrelaza identidades y tradiciones, manteniendo viva la esencia de un género musical que trasciende fronteras.
