Estudiantes de La Plata y la economía colombiana: un paralelismo transformador
En 1966, el club de fútbol Estudiantes de La Plata y la economía de Colombia presentaban similitudes notables. Ambos eran considerados como “pequeños” en contextos donde el éxito parecía reservado para unos pocos. Mientras el equipo argentino luchaba por destacarse en un entorno dominado por los grandes, Colombia enfrentaba desafíos económicos que limitaban su crecimiento.
Osvaldo Zubeldía: El artífice de una mentalidad ganadora
La llegada de Osvaldo Zubeldía como director técnico marcó un antes y un después para Estudiantes de La Plata. Zubeldía, convencido de que el trabajo constante y la dedicación son claves en el deporte, institucionalizó práticas que transformaron el enfoque del fútbol en su equipo. “Todo se puede lograr con trabajo y dedicación”, solía decir, instando a sus jugadores a demostrar que el fútbol no conocía de debilidades.
Su éxito culminó con la consecución de tres Copas Libertadores (1968, 1969, 1970) y otros títulos internacionales, desafiando las expectativas para un club de limitado presupuesto. Esta trayectoria no solo se tradujo en triunfos, sino también en un cambio paradigmático en la mentalidad de los jugadores colombianos.
Un legado que trasciende el deporte
En las cinco décadas siguientes, el legado de Zubeldía permeó el fútbol colombiano, simbolizado por una cadena de entrenadores que continuaron su filosofía. Francisco ‘Pacho’ Maturana, José Néstor Pekerman y actualmente Néstor Lorenzo han seguido su ejemplo, enfatizando la necesidad de líderes con visión y trabajo colaborativo, tal como lo señaló Luis Carlos Galán.
Transformaciones en la economía colombiana
Simultáneamente, la economía colombiana ha vivido transformaciones significativas. Desde finales de los años sesenta, figuras como Carlos Lleras Restrepo y Rodrigo Botero Montoya iniciaron reformas que estabilizaron el entorno cambiario y contribuyeron al crecimiento económico. En los setenta, Lauchlin Currie utilizó la vivienda para impulsar la urbanización y la industrialización, beneficiando a las clases medias y bajas.
A lo largo de los años, personalidades como Eduardo del Hierro y Jaime García Parra cambiaron la dinámica del sector petrolero mediante la transición hacia contratos de asociación, justo en medio de la crisis energética mundial de 1973-1974. Este enfoque fue crucial durante la transformación de Colombia de exportador a importador de petróleo.
La liberalización comercial, impulsada por Luis Fernando Alarcón y María Mercedes Cuéllar, encontró continuidad con el presidente César Gaviria y su equipo de economistas, quienes implementaron reformas estructurales que beneficiarían a la economía en el largo plazo. A finales de los años noventa, figuras como Juan Camilo Restrepo y Juan Manuel Santos lograron un saneamiento económico, apoyándose en el Plan Colombia, que generó resultados positivos durante la primera mitad del siglo XXI.
Retos y oportunidades futuras
A pesar de los avances, la última década ha visto a Colombia enfrentar desafíos significativos, incluyendo un aumento en la deuda pública que ha puesto en riesgo la sostenibilidad económica. Es fundamental que se retome el camino del crecimiento responsable. Al igual que Zubeldía y Botero revolucionaron sus respectivos campos, hoy se requiere una nueva generación de líderes en política y economía que rescaten la pedagogía, la seriedad y la creatividad para abordar las necesidades del país.
